miércoles, 5 de diciembre de 2012

Parálisis

Antes de publicar esta entrada, releí lo que escribí hace un par de meses y me sorprendió como coincide mi manera de sentir. Tristeza y decepción.

Todo está paralizado, hasta mis ganas de hacer. Mi vida se ha detenido. Me siento pequeña e indefensa. Muchas cosas pudieron ser diferentes; debieron serlo. Todos creyeron en mi y fracasé. 8 meses se fueron en el intento, tiempo que ahora resulta perdido y mal invertido. Todo parece seguir siendo lento y difuso. Justo hasta atrás me encuentro yo y mi miedo a seguir creyendo. Mi miedo a no saber para donde caminar, miedo de no poder encontrar lo que me llene y realice como profesional. Miedo de no saber si soy capaz de lo que todo este tiempo he creído. Miedos tontos, pero al fin y al cabo, miedos; angustia atroz de ver como todos avanzan, menos yo. Y aquí me quedo, estancada en el fracaso.


jueves, 18 de octubre de 2012

El inicio del fin.


Finalmente me encuentro aquí; donde más quise y por lo que di todo. No es como lo esperaba, pero ¿qué sale de acuerdo a los planes? No hay porque mortificarse, la vida sigue, yo sigo, ¿mis ilusiones?, no tanto; y ahí es donde empieza el torbellino. Mi cabeza se llena de cuestionamientos ingenuos. ¿Qué hice mal?, ¿qué no planee?, ¿por qué?, ¿por qué no?, ¿qué es lo que quiero?. Como si de verdad existiera una respuesta a todo eso. Entonces una preocupación intensa se apodera de mi. Me doy cuenta de que ya no sé qué espero de mi. Necesito volver a encontrarme.

Fué duro, frío y desconcertante. Fué. Eso es lo mejor. Ha pasado lo peor y sobrevivimos. Ya puedo vivir para contarlo, puedo sonreír y decir: "Lo intenté". Podría hacerlo, es lo que todos aconsejan, incluso yo lo aconsejaría, pero no es tan sencillo, ojalá lo fuera. Las palabras buscan consolar, encontrar un equilibrio entre lo que sucedió y lo que quisimos que fuera. Para eso sirven, por eso son parte esencial de mi. Pero cuando existe un fracaso no llegan a ser tan poderosas. Nada lo es.

Pero, "fracasado es aquel que no lo intenta", vuelven a decir. ¡Claro! tienen razón. No tuve miedo y me aventé. Pero hoy empiezo a  sentir miedo, y no ante el nuevo intento, sino por ya no saber hacía donde saltar. Como todo en la vida, somos ciclos. Este ciclo se está desvaneciendo e inevitablemente algunos sueños se van junto con él. Y entonces la palabra "fracaso" vuelve a retumbar en lo más profundo de mi.

Aprendí mucho, sin duda. Crecí, también. Encontré una de las mejores partes de mi vida, sonriendo digo que sí. Pero eso no le quita la decepción al fracaso; desilusión, tristeza a ratos, frustración generalizada, pero decepción, oscura y macabra decepción.

Decepcionada de los planes y de los idealismos. Decepcionada de los agentes extras que nadie contempla. Decepcionada de la rutina. Decepcionada del diseño y la manera en que lo tratan. Decepcionada de la desconfianza- Decepcionada de la desvalorización humana y artística. Decepcionada de la incongruencia que siempre nos persigue. Decepcionada de mi y mi eterno soñar. Decepción fatal.

Por momentos me encuentro con la respuesta, o una parte de ella. Y es que "nunca confiamos en nosotros mismos" y "nunca hicimos nuestro el sueño". Se quedó en el aire, en promesas, en la nube. Lo tuvimos enfrente pero no lo agarramos bien, lo dejamos pasar y entonces explotó. Allá bien lejos de nosotros, lo vimos caer, pedazo a pedazo y ya nada pudimos hacer.

¿Poder o querer? eterno conflicto de significados y razones. "El que quiere puede", repiten. Yo creo más bien que el que quiere, puede levantarse una y otra vez. Porque es claro que lo que más cuesta trabajo es darle vida a un sueño. A esa pequeña sensación intangible que de repente un día nos despierta con una sonrisa o incluso una lágrima. Esas ganas tremendas de crear y llegar a más corazones que cabezas. Ese idealismo que cobra vida y lo contagia todo. Eso que en mi, está desapareciendo.

Estoy aquí. Por un lado soy una persona muy feliz y plena. Lo sé y lo compruebo todos los días al tomar su mano. Por el otro lado, estoy cambiando. Estoy tratando de visualizar lo que quiero hacer conmigo. No pretendo que sea fácil, eso lo he aprendido bien, pero realmente no me importa cuan difícil sea siempre y cuando amanezca todos los días motivada a intentarlo. Y que cuando me vea en el espejo, me reconozca y por fin pueda decir: me encontré de nuevo.

jueves, 5 de julio de 2012

Mental


Un tarde cualquiera, nada inusual; entre tanta pasividad se deja apreciar la siguiente frase: "Las mejores historias comienzan con una mala decisión." Y de golpe me obliga a darme cuenta lo que mi vida, hasta ahora, había sido; idealismo, ingenuidad, utopía y torpeza. No porque lo bueno no exista, sino porque lo perfecto está solo en la mente. Durante 24 años siempre he querido hacerlo bien, escoger lo bueno, ser perfecta; así soy, o mejor dicho, así he querido ser. Sin embargo hoy comienza a arder en mi esa necesidad de sobrepasarme y comprender cuántas veces la mente me ha sofocado tratando de ayudarme y la razón por la que la he ignorado. Hoy me topo con la terrible verdad de que me encuentro viviendo un sueño producto de una mala decisión (o lo que en aquel entonces creí que había sido.) Todo lleva un ritmo, se mueve cautelosamente buscando en el trayecto crecer y aplastar con fuerza lo que antes daba pavor. De eso se trata, de revivir nuestro más oscuro pasado, saborearlo y no pensarlo más.

Una mala decisión puede provocar una serie de eventos más que afortunados, así es la vida y ahí radica nuestra incongruencia. Eso me hace sonreír porque por fin entendí que no es que algunas cosas carezcan de sentido, es que simplemente no necesitan tenerlo. 

lunes, 5 de marzo de 2012

Rayos de luz

Rojo. La insensatez del corazón que se encierra con valentía.
Amarillo. La alegría incomprensible que no se tarda en desvanecer.
Blanco. El silencio de tu mente revelando las palabras.
Azul. La nostalgia efímera de abrazar lo que ya no eres.
Negro. La manía de aferrarte a la inmensidad de tu alma.
Verde. Inefable calma que hace relucir la esencia de tu sombra.
Morado. La exquisitez que se derrama a través de una lágrima.
Gris. Melancolía fragmentada que se enreda con tus dudas.
Naranja. Satisfacción con la que te atragantas sin siquiera mirar.















Y tú, ¿de qué color te sientes hoy?

miércoles, 8 de febrero de 2012

Fachadas

La primera búsqueda pareció ser la última; sus ojos brillaron por un instante pero el momento se disolvió. Anduvieron por kilómetros observando fachadas de colores que esperaban guardar ilusiones de antaño. El camino comenzó a definirse mientras ellos, con un abrazo construyeron la curva que faltaba y que los llevaba a comenzar esa nueva e incesante búsqueda.

enero 7, 2012

martes, 17 de enero de 2012

Cualquiera

Prisa-pasos-tráfico-miradas-ruido-sirenas-angustia-estrés-más pasos-roces-sorpresa-sonrisa-segundos-silencio-recuerdos-suspiros-calma-noche

Así pasa un día más, o ¿un día menos?

11-ene-2012

viernes, 6 de enero de 2012

Primera del año

Que comience un nuevo año, renovado y reinventado; días llenos de luz buscando suplantar cualquier nubarrón de oscuridad. Que empiece nuestro año, el que dura una eternidad.